Debo mencionar que el área en donde me encontraba aplicando era algo complicado puesto que exigían como tal ciertos títulos, tarjeta profesional o incluso saber sobre nómina - siendo esta un manejo más relacionado a contabilidad que a humanidades, pero aún así buscaban un psicólogo. Así que, para una comunicadora social era complicado encontrar algo en recursos humanos como reclutadora (2 años de experiencia) y al no tener experiencia con su título tampoco se facilitaba encontrar algo relacionado con sus estudios porque las empresas buscan siempre beneficiarse.

Llegué a tener 5 entrevistas, donde de estas solo en una avancé hasta el último filtro y me ghostearon. Llegué a realizar hasta 10 pruebas psicotécnicas como primer filtro, donde obviamente no pasé y tampoco me avisaron. De 93 postulaciones, no obtuve respuesta de 52 vacantes, fui rechazada de 29 (correos de agradecimiento), y en 10 vacantes no quise continuar por mi cuenta (algunos eran para enviar un vídeo introduciéndome, otros fueron vacantes de prestación de servicios que pagaban por debajo mi expectativa salarial, o crear una cuenta en la plataforma de reclutamiento).

Para cuidar mi salud mental en todo este proceso, descargué una plantilla de notion de @camiconlaburo (en tik tok) para registrar mis postulaciones, de esta manera al registrar la fecha y pasaban al menos de 3 a 5 días es porque no pasaba. Y en ningún momento me equivocaba con el tiempo porque a los días o llegaba el agradecimiento o en verdad nunca te contactaban. 

Al pronto de cumplir los 5 meses de desempleada mis ánimos ya se habían reducido cruelmente hasta el punto de ya no confiar en mis habilidades, antes pensaba que las empresas no sabían elegir, ahora luchaba con los pensamientos de "debí estudiar otro programa", "debí haber hecho cursos mientras trabajaba", y seguía doliendo esos silencios en postulaciones. Esto poco a poco me carcomía, pero afortunadamente, inicié un diplomado en noviembre, esto me ayudó a tener mi mente ocupada y además me di cuenta que me gustaba aprender (algo que nunca disfruté sino hasta ahora a mis 28 años), ingresé a un programa de desempleados en una caja de compensación y conocí a personas que estaban en el mismo estado que yo, de cierta forma te dan ánimos saber que a pesar de todo algunos todavía tienen sus sueños intactos, metas que alcanzar, mientras que yo solo me golpeaba cada vez más con mis palabras. Todo esto fue de manera virtual y no tuve que pagar para aplicar. Fue y continua siendo enriquecedor.

Actualmente encontré un trabajo como contratista, es en inglés, no es algo aún fijo, pero es un comienzo. Y la crisis de los 27-28 existe gente. Así que les recomiendo rodearse y mantener la mente ocupada, o pagar un psicólogo si cuentan con el dinero.